La concursante Carlota Prado, de la edición de Gran Hermano España de ese programa, estaba inconsciente cuando la agredió un compañero dentro de la casa.
Durante el programa conoció a otro de los concursantes, José María López, que se convirtió en su pareja. Carlota le acusa de haberla violado tras una fiesta en la que consumieron alcohol y ella acabó inconsciente. "En las imágenes se ve perfectamente que se aprovecha de mí en la habitación y que yo estoy inconsciente. No llego a explicarme cómo el programa lo permitió", ha declarado.Tras la fiesta, José María López fue expulsado de forma disciplinaria por "conducta intolerable" y ella también abandonó temporalmente la casa. Era noviembre de 2017, y en las pantallas de televisión abierta de España se emitía la decimoctava edición de Gran Hermano. 

Los concursantes habían superado las pruebas semanales y, como recompensa, recibieron un premio: celebrarían una fiesta con alcohol. Al caer el sol el viernes 3 de noviembre, las botellas de ron, ginebra y vodka llegaron a la casa, y al término del primer chupito, comenzaron los míticos perreos frente al espejo y los gritos desentonados, y el poder de la felicidad embriagadora se apoderó de la casa. Sin embargo, en segundo plano, tras los bailes y las carcajadas, las cámaras registraron una escena mucho peor. , las cámaras la captan sentada en la sala común de la casa. José María López, con quien había iniciado una relación sentimental dentro del programa, se acerca a ella y empieza a acariciarla y manosearla. 

Ella, inconsciente y aturdida, forcejea para que la deje tranquila, pero él la pone de pie, y ambos abandonan la sala. "Tengo lagunas mentales de aquella noche. Las imágenes en las que me encuentro en el salón, que he subido a mi cuenta de Instagram, no las recuerdo. […] Se ve un forcejeo, porque evidentemente no me gusta que me metan mano. Lo que está pasando en ese momento ya es suficiente como para tomar cartas en el asunto, algo que GH no hizo", contó Carlota.