La naturaleza no deja de sorprender: misteriosos agujeros en los suelos de Siberia y ahora la aparición de un lago en plena zona desértica al sur de Túnez.
El fenómeno, descubierto a principios de mes, cubre un área de 2.6 acres y tiene una profundidad de 50 pies, según reseñó el Hufftington Post.
Oficiales no logran determinar las causas del surgimiento de este acuífero, pero la hipótesis más sostenida apunta a que un temblor pudo haber fracturado una capa de roca que sostenía una reserva subterránea.
Sin embargo, pese a su atractivo, funcionarios de seguridad advirtieron a residentes y visitantes a no bañarse en el agua, ya que podría ser perjudicial por las minas de fosfato que hay en la región.
Sin embargo, pese a su atractivo, funcionarios de seguridad advirtieron a residentes y visitantes a no bañarse en el agua, ya que podría ser perjudicial por las minas de fosfato que hay en la región.