China: Una pareja de padres chinos prefirieron pagar su adicción a los videojuegos que mantener a sus hijos; los venden a traficantes de menores.
A Hui y A Mei son una pareja de padres jóvenes que viven en unión libre y que aman los videojuegos, incluso más que a sus propios hijos.
En una entrevista para la televisión local desde un centro de detención donde permanecen acusados de tráfico infantil, estos padres confesaron que el primer hijo de la pareja no fue planeado. A Hui entonces se negó a mantenerlo, por lo que en cuanto nació decidieron venderlo a traficantes de menores.Leer más
A Hui y A Mei son una pareja de padres jóvenes que viven en unión libre y que aman los videojuegos, incluso más que a sus propios hijos.
En una entrevista para la televisión local desde un centro de detención donde permanecen acusados de tráfico infantil, estos padres confesaron que el primer hijo de la pareja no fue planeado. A Hui entonces se negó a mantenerlo, por lo que en cuanto nació decidieron venderlo a traficantes de menores.Leer más
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