En los Estados Unidos una mujer llamada Ashley denunció vía redes sociales que su ensalada de pollo, manzana y arándano tenía un regalo peculiar: Una navaja de afeitar.
El empleado que la preparó aceptó que el cargaba una navaja similar al momento de lavar la lechuga, pero nunca se dio cuenta de su desaparición.
"Me lo pude haber metido en la boca y tragado", dijo la mujer.
El empleado ha sido despedido. Se desconoce si la mujer quiere empezar una demanda contra la cadena de hamburguesas propiedad de PepsiCo.
