Para celebrar su mayoría de edad, una joven italiana se puso un reto: hacerle oral a sus invitados a su fiesta de cumpleaños número 18.
Lo logró, pero terminó en el hospital. La muchacha, que desde San Remo quiso "comerse" el mundo entero, ingresó al hospital por una aparente congestión, por lo que se le practicó un lavado gástrico; o le cayó mal el pastel o la leche... Un testigo afirma que mientras la festejada "soplaba" las 18 velotas del pastel, exclamó: "ho compiuto 18 anni e ora posso fare quello che voglio" (he cumplido 18 años ahora puedo hacer lo que quiera).
Algunos indican que el comportamiento de esta insaciable chica, sólo refleja una sociedad educada que como algo que debe tomarse como una victoria, un reto que hay que romper y quien tenga más y mejor es superior a los demás.
Lo logró, pero terminó en el hospital. La muchacha, que desde San Remo quiso "comerse" el mundo entero, ingresó al hospital por una aparente congestión, por lo que se le practicó un lavado gástrico; o le cayó mal el pastel o la leche... Un testigo afirma que mientras la festejada "soplaba" las 18 velotas del pastel, exclamó: "ho compiuto 18 anni e ora posso fare quello che voglio" (he cumplido 18 años ahora puedo hacer lo que quiera).
Algunos indican que el comportamiento de esta insaciable chica, sólo refleja una sociedad educada que como algo que debe tomarse como una victoria, un reto que hay que romper y quien tenga más y mejor es superior a los demás.
